El 1 de Noviembre de 1971 la empresa Tranvías Eléctricos de Granada S.A. (en adelante TEGSA) se convertía en concesionaria de transporte público por carretera, tras acordar el Consejo de Administración el abandono definitivo de la explotación tranviaria a partir de 1º de Agosto de ese año, y solicitar la transformación de las dos líneas con carácter de tranvía interurbano, Granada-Armilla-Churriana de la Vega-Gabia la Grande y Granada-Maracena-Albolote-Atarfe, en líneas de autobuses.
Era el comienzo de un nuevo negocio y a la vez el final de una gran empresa que durante largos años (casi setenta) movilizó buena parte de los viajeros y las mercancías de Granada capital, su vega, del Valle de Lecrín y del puerto de Motril, y que simbolizó en la primera mitad del siglo XX la modernidad y el fomento de la riqueza de la provincia.
El 24 de Diciembre de 1903 se constituyó en Zaragoza la Sociedad Anónima “Tranvías Eléctricos de Granada” (TEGSA), estando al frente D. J. Nicolás de Escoriaza y Fabro, un industrial y financiero zaragozano vinculado a los negocios ferroviarios, entre ellos la conocida fábrica de material móvil Carde y Escoriaza. El servicio urbano de viajeros fue inaugurado el 7 de Julio de 1904.
Desde su inicio, Escoriaza consideró insuficiente la red urbana, que en su recorrido por el centro de la ciudad ofrecía un trazado muy quebrado y por calles muy estrechas, por lo que planeó nuevos proyectos que complementaran la primitiva concesión con objeto de movilizar un mayor volumen de viajeros y mercancías. En este contexto, la floreciente industria azucarera ( principal referente de la economía granadina de la época) y las penosas comunicaciones de los numerosos pueblos cercanos a Granada crearon la coyuntura ideal para ofrecer un modo de transporte colectivo rápido, económico cuyas necesidades eran muy parcialmente cubiertas por la red ferroviaria de vía ancha. Unos meses antes de la inauguración de los tranvías, el diario El Defensor de Granada se hacía eco de las intenciones más inmediatas de la nueva sociedad: “la empresa se propone tender inmediatamente los raíles para la construcción de ramales a Maracena, Armilla y Santa Fe”.
El 22 de Marzo de 1914, la línea interurbana de Atarfe llegó a Maracena. La prolongación a Albolote y Atarfe se inauguró el 24 de Diciembre de 1917. Tras el cambio de servicio por autobuses, los tranvías continuaron circulando por estos pueblos al dar servicio a la línea de ferrocarril secundario a Pinos Puente, que ya en manos de Feve, fue clausurada el 20 de Enero de 1974.
40 años después Maracena apuesta de nuevo por este medio al formar parte del trazado de la línea 1 del Metropolitano de Granada, impulsada por la Consejería de Obras Públicas y Transportes de la Junta de Andalucía. Es por ello importante el recuerdo y el conocimiento de las nuevas generaciones del pasado más reciente de esta localidad, muy vinculado a este eficiente medio de transporte.
CONTENIDO DE LA CHARLA-CONFERENCIA
Se abordó un recorrido histórico de la línea tranviaria de Maracena a través de una selección de imágenes recopilada especialmente para la ocasión. Las imágenes fueron el punto de partida para disertar sobre la historia de la compañía y la evolución de los distintos modelos de tranvías a lo largo de casi 70 años de existencia.
0 Comments