Exposición de motivos

Una de las decisiones más discutidas y discutibles de aquel plan de cierres de líneas ferroviarias altamente deficitarias de 1984 fue, sin duda, la clausura del tramo que comunicaba Andalucía con Murcia a través del Valle del Almanzora, conocido por Guadix-Almedricos.

Discutida por lo que suponía cerrar una puerta de comunicación muy importante entre Andalucía y el Corredor ferroviario del Levante en unos momentos en los que la comarca almeriense empezaba a destacar a través del sector del mármol.

Discutible porque se dieron todas las condiciones para su cierre definitivo: abandono en el mantenimiento, conservación y explotación de la línea, justificando así su déficit; inexactitudes en los estudios que recomendaban el cierre, haciendo caso omiso a la rentabilidad social y el futuro desarrollo de las comarcas orientales de Granada y Almería; la Junta de Andalucía no evitó su cierre sufragando el déficit como sí hizo manteniendo las dos líneas que comunicaban Huelva y Sevilla con Badajoz, la que unía Huelva con Ayamonte y el eje Granada-Sevilla, situación que con el paso del tiempo ha generado cierta vergüenza en los dirigentes políticos, reconociendo implícitamente que aquel cierre fue un error.

Una línea que estuvo desde su inicio marcada por el carácter minero y por la débil infraestructura, característica común en las líneas del Sureste Andaluz, quedando relegada a servicios secundarios que no hicieron más que agravar la situación que culminó con el cierre a partir del 1 de Enero de 1985.

Desde entonces muchas han sido las voces favorables a su reapertura, pero los hechos han confirmado lo contrario: levantamiento de vías, expolio y desaparición de instalaciones, rupturas de trazado para la construcción de carreteras, proyectos de conversión a vía verde. Los argumentos utilizados por los políticos han servido para culparse los unos a los otros y como arma arrojadiza para la confrontación política.

¿Qué propone la AGRAFT?

En estos nuevos tiempos para el ferrocarril, donde el ferrocarril convencional empieza a ser historia gracias a los nuevos trazados de Alta Velocidad, no debemos hablar de reapertura, sino de rediseño completo y de construcción de un nuevo trazado adaptado a los estándares de Altas Prestaciones (tráfico mixto y velocidades máximas de 220 km/h).

Desde AGRAFT apoyamos este eje vertebrador del interior oriental andaluz y puerta de enlace con el Corredor Mediterráneo, sin menoscabo del enlace costero de Almería con Murcia, ya que facilita y permite relaciones regionales y servicios tipo Cercanías. Exigimos estudios y plazos concretos, así como intenciones de afrontar claramente el proyecto, tan decididas como la conversión a autovía de la carretera que discurre paralela al ferrocarril del Almanzora.